Hace algún tiempo se echó a navegar
un inmigrante de un país vecino
soñando ingenuo con otro lugar
donde hallar el pan y el vino,
donde poder trabajar.
Sueño a sueño, muerto a muerto,
sueño a sueño, muerto a muerto.
De nada sirve quererlo ocultar
puesto que el riesgo ya importa un comino y sólo ansían su sueño alcanzar.
Inmigrante, tu destino
puede acabar en la mar.
Sueño a sueño, muerto a muerto,
sueño a sueño, muerto a muerto.
Por más que sufras nadie ha de llorar
cuando te falle tu remo divino
y entre las aguas te puedas ahogar.
Emigrante no hay camino
si el final es naufragar.
Sueño a sueño, muerto a muerto,
sueño a sueño, muerto a muerto.
Emigrante, ese lugar,
el paraíso no existe.
Y es allí donde naciste
donde puedes realizar
el sueño que un día tuviste.
Emigrante, lo que oíste,
lo que te quieren contar
a ser verdad se resiste
pues quieren verte muy triste
o te quieren engañar.
Que el hogar en que caíste
es donde está tu lugar,
sé fuerte, vive y resiste
embiste con lanza en ristre
y así podrás mejorar.
Emigrante, tu destino
puede en la mar acabar.
Comentario: Es evidente que ese vocablo "Llorares" que da título a estos versos no es correcto, pero me ha parecido acertado así titularlo simulando el Cantares de Antonio Machado.
Autor Del Poema: ©donaciano bueno
Ver más en: donacianobueno.com
Comentarios