Juventud, yo te consumo con esta madera que fue verde en el humo más claro que haya llevado nunca el aire....
El uno siempre vive la vida en rosa, la juventud que no acaba nunca, segunda infancia menos taciturna, ni deseos ni lamentos...
Cuántas veces, amor, por retenerte puse a tus pies mi juventud rendida. Y cuántas a pesar de estar herida te la volví a entregar...
Al despertar de un sueño, buscas Tu juventud, como si fuera el cuerpo Del camarada que durmiese A tu lado y que al alba no...
Cuando asedien tu faz cuarenta inviernos y ahonden surcos en tu prado hermoso, tu juventud, altiva vestidura, será un andrajo...